Un dragón se abre paso en el cielo
Baja a la tierra descalzo, sin miedo
Se mescla entre los humanos
Y nos atraviesa el corazón
Con su fuego cálido y perpetuo
El dragón lleno de fuego nuestros corazones
Y los convirtió en una caldera
Frenética, violenta
Que nos hace ver la vida desde otra perspectiva
Vamos con el corazón en llamas
Y con la vida a las espaldas
Viviendo todo en los momentos correctos
El dragón nos ha envuelto en fuego
Y nos lo ha encargado
Somos los custodios de el
No perdamos esta intensidad
Este calor, esta pasión
Somos fuego, somos eternos
En la lluvia, en la tormenta
En la rabia y en la alegría
Vamos viviendo todo en el tiempo correcto
Y mi amor
El tiempo no tiene idea lo que nosotros nos queremos
Ni el fuego, ni el dragón
El dragón vuelve al cielo contento
Nos ha encargado el fuego
Mantengámoslo vivo
Con todo lo que somos
Con nuestra eternidad
Y nuestro amor